Lo bueno realmente se hace esperar, y lo fácil nunca es bueno.

Todos tenemos los mismos deseos e ilusiones, pero con el correr del tiempo, algunas esperanzas se nos esfuman. Muchas de las cosas que vivimos, son temporales, y luego de un tiempo donde aprendemos eso que teníamos que sacar de la situación, pasa. Muchas veces no pensamos que podamos vivir equis cosa de la vida, o no tenemos muchas esperanzas en ello. Pero cuando llega el momento y viene a nosotros, nos sentimos estúpidos por haber tenido ese pensamiento tan pesimista. Todo tiene un tiempo, y como dijo alguna vez algún escritor conocido “Cada persona tiene su tiempo personal”. Cierro los ojos, respiro, cuento hasta 10 y pienso “lo bueno se hace esperar”.